Testigos del coche: ¿Qué significan?
- Importancia de los testigos del coche
- Código de colores de los testigos del coche
- Significado de los testigos luminosos del coche
La tecnología que incorporan los nuevos vehículos facilita la detección de averías y fallos, ya que el sistema electrónico y los sensores instalados a lo largo del coche permiten identificar problemas y alertar al propietario o conductor. Los testigos del coche son las luces que se encienden en el cuadro de instrumentos detrás del volante para avisar sobre alguna anomalía en el funcionamiento del vehículo.
Importancia de los testigos del coche
Los testigos del coche alertan al conductor cuando la mecánica del vehículo falla o necesita una revisión. Es crucial prestar atención a estos testigos luminosos para detectar posibles fallos antes de que se conviertan en averías graves y costosas.
Código de colores de los testigos del coche
Para identificar la gravedad de los problemas, los testigos del coche utilizan un código de colores:
Rojo: indica un problema grave que requiere detener el vehículo inmediatamente y buscar asistencia.
Amarillo o ámbar: señala un fallo en algún sistema que requiere parar y solicitar ayuda profesional, aunque se puede circular hasta llegar a un taller.
Otros colores (verde, azul, blanco): Proporcionan información sobre el estado del vehículo, pero no indican averías graves. Por ejemplo, las luces que están conectadas.
Significado de los testigos luminosos del coche
Para entender el significado de los pictogramas en los testigos del coche, es importante consultar el manual de usuario. Aunque algunos de estos símbolos están estandarizados, pueden variar entre fabricantes y modelos.
Ejemplos de testigos del coche más comunes
Los pictogramas que avisan de las averías más graves o que es más común que se enciendan durante la conducción, según señala el RACE, son los siguientes:
Testigo del sistema de control de gases de escape: indica que el motor está en modo de emergencia. Se nota pérdida de potencia y el vehículo no superará las 2.000 revoluciones por minuto.
Testigo del sistema de precalentamiento en motores diésel: hay que esperar a que se apague para arrancar. Si parpadea, indica un fallo en el control del motor.
Testigo de presión de inflado de los neumáticos: avisa de que la presión no es correcta o hay un pinchazo.
Testigo de fallo en el alternador: indica que la batería no está cargando, posiblemente debido a un fallo en la correa de servicio o el alternador.
Testigo del aceite: puede indicar nivel bajo o presión baja. Si es amarillo, se puede circular hasta un taller; si es rojo, hay que detener el coche inmediatamente. De lo contrario, se podría llegar a romper el motor.
Testigo de exceso de temperatura del líquido refrigerante: indica fallos en la gestión del motor, sistema de encendido o inyección. Si es amarillo, se debe ir al mecánico para un diagnóstico.
Conclusión
Prestar atención a los testigos del coche es esencial para mantener el vehículo en buen estado y evitar averías graves. Consultar el manual de usuario y acudir a un mecánico ante cualquier duda puede ahorrar tiempo y dinero a corto y largo plazo.