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27 noviembre 2023

Arreglar o vender un coche viejo: cómo tomar una decisión

  1. La edad del coche y su kilometraje
  2. Seguridad y consumo del coche viejo
  3. ¿Cuánto cuesta repararlo?
  4. ¿Cuánto vale el coche?
  5. Ventajas e inconvenientes de reparar un coche viejo

Cuando el coche familiar, ese que ha estado durante años a nuestro lado y sin el que ya no nos imaginamos nuestro día a día, se estropea, toca enfrentarse a pregunta: ¿merece la pena arreglar un coche viejo o es mejor venderlo? La respuesta a este interrogante debe ser lo más honesta posible ya que, de lo contrario, podríamos acabar invirtiendo y perdiendo mucho dinero.

Hay muchos factores a considerar antes de tomar una decisión. La edad del vehículo es uno de ellos, pero también el tipo de uso que le demos, la disponibilidad de piezas que haya para las reparaciones, nuestros ingresos y salud financiera, la situación del mercado de segunda mano, la de las ayudas si se achatarra un vehículo... No hay que pasar nada por alto.

En este artículo trataremos de recoger todos los gastos e interrogantes importantes para decidir si lo mejor es vender el coche averiado o repararlo, intentando tener en cuenta todos los factores que puedan influir en la decisión.

La edad del coche y su kilometraje

Lo primero es, indudablemente, hacer una evaluación del estado del coche, empezando por la edad. Si el coche pasa de los 12 o 15 años, quizás ha llegado el momento de plantearse la compra de un nuevo automóvil. Obviamente, los años no pasan por igual en todos los vehículos, por ello también es importante mirar el cuentakilómetros: si la cifra es muy alta, puede ser que el coche ya ha llegado a su límite. Si, por el contrario, pese a la edad ha recorrido pocos kilómetros, aún se podría salvar.

Seguridad y consumo del coche viejo

Otro aspecto que muchas veces no se tiene en cuenta, pero que no está de más considerar, son las cifras de consumo del vehículo. Los coches viejos tienden a gastar más gasolina o diésel, por lo que, si el coste de la reparación ya de por sí es elevado, quizás nos conviene cambiar de coche y apostar por un motor más eficiente.

Lo mismo sucede con el nivel de seguridad del vehículo: los coches nuevos son mucho más seguros que los viejos y si, además, la avería o el incidente ha podido afectar al nivel de seguridad de nuestro coche, quizás deberíamos ir pensando en sustituirlo.

¿Cuánto cuesta repararlo?

No se puede obviar el coste de la reparación, así como la frecuencia con la que el coche nos obliga a pasar por el taller. Si el precio de la factura del taller es asumible y el vehículo falla muy de vez en cuando o, incluso, es la primera vez que nos obliga a ir al mecánico, podríamos pensar en quedárnoslo.

Si, por el contrario, la reparación se dispara a los varios cientos de euros o incluso nos cuesta más de mil euros y, al mismo tiempo, el coche lleva ya un tiempo fallando, la mejor decisión será venderlo o, al menos, empezar a pensar en cambiar de vehículo.

El siguiente interrogante está muy relacionado con esta última pregunta y no se puede pasar por alto.

¿Cuánto vale el coche?

Tanto para decidir si reparar el coche viejo como para apostar por venderlo, es imprescindible saber cuánto vale en el mercado. Para ello, podemos consultar las tablas de valor venal del BOE, donde se estima el valor de mercado de cada vehículo según marca y modelo.

También se puede llegar a cabo una búsqueda en las principales webs de compraventa de coches de segunda mano para estimar por cuánto dinero podríamos vender nuestro vehículo viejo, según lo que veamos tras una investigación de la oferta. Eso sí, en este paso tendremos que tener en consideración que, de vender el coche, quizás deberíamos repararlo o avisar al comprador de la avería existente.

Ventajas e inconvenientes de reparar un coche viejo

Cuando hemos recabado toda esta información, toca tomar una decisión. En este paso, podemos incluso servirnos de un taller de confianza que nos ayude a ver en qué estado real se encuentra nuestro coche viejo y que nos aconseje qué opción sería la más sensata y conveniente.

También se pueden poner en la balanza las ventajas y las desventajas. Por un lado, arreglar el coche nos evitará tener que empezar los trámites de la venta de nuestro vehículo, así como los de búsqueda de un coche nuevo.

Sin embargo, en el lado contrario, vender el coche viejo nos podría ayudar a conseguir ayudas para comprar un vehículo nuevo más eficiente y más seguro (por ejemplo, con achatarramiento las ayudas del Plan Moves III llegan hasta los 7.000 euros en algunos casos) y dejaremos de pasar por el taller y gastar dinero.

Al final, no existe una respuesta única. Para decidir si vender o arreglar un coche viejo, lo mejor es tratar de responder a estos interrogantes y sopesar la situación personal, así como la económica, para tomar la mejor decisión posible.

Si lo compruebas de antemano, te ahorras sorpresas desagradables.
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